MANU RAMOS. A Carlos Bonet, presidente de «Vecinos por Majadahonda«, abonado del Rayo Majadahonda, aficionado al fútbol y practicante de varios deportes de la raqueta, se le ve cada domingo en el Cerro del Espino e incluso en partidos fuera de casa, como el que se disputó en el estadio Santo Domingo de Alcorcón cuando el club militaba en Segunda División. En el ejercicio de su libertad decidió no acudir al Wanda Metropolitano como protesta por la decisión de la Junta Directiva del Rayo Majadahonda de no celebrar el encuentro en el Cerro del Espino «y así tirar por la borda la ilusión de los 800 aficionados que van cada partido al Cerro ya llueva o haga frío para apoyar a los jugadores, que ellos no tienen la culpa de tal decisión. A quienes le han quitado la ilusión es a los que realmente van al Cerro, con lo que han conseguido descafeinar dicha eliminatoria pese a la diferencia de nivel entre ambos equipos». En esta entrevista celebrada este viernes 7 de enero de 2022 en el restaurante Onneca de Majadahonda hace balance deportivo y político del año que acaba de concluir y anticipa algunas iniciativas para el último año y medio que se avecina hasta el término de la legislatura en mayo de 2023.
¿Por qué decidió no ir al Wanda? Hubo muchos socios y abonados que estaban en contra de la decisión pero sí acudieron a ver el partido porque la entrada era gratuita para ellos... –No acudí por coherencia entre lo que se dice y lo que se hace. Efectivamente «Vecinos por Majadahonda» fue el único partido político que emitió un comunicado en el que protestaba por trasladar el partido al Wanda Metropolitano porque estimábamos que un acontecimiento así debía celebrarse en el Cerro del Espino. Lamentablemente el club no lo consideró y hay que respetarlo pero cada uno, como se suele decir, recoge lo que siembra. Y han demostrado que la afición y abonados les importan poco y que decir del Equipo del Gobierno de PP y Vox: la callada por respuesta como la oposición, exactamente igual, ni Ciudadanos ni el PSOE alzaron la voz para posicionarse. Una pena, pero es lo que tenemos y lo que se ha votado pero seguimos pensando que es un buen momento para que desde el equipo de Gobierno, con nuestro alcalde a la cabeza, se «moje» en este tema e intente mediar para que las direcciones del At de Madrid, Rayo Majadahonda y Ayuntamiento se pongan de acuerdo y tengamos el Cerro totalmente cubierto. Y si no fuera posible, al principio como mínimo un 70%. ¿Vio el partido por televisión? –Sí, claro, por supuesto. En el plano deportivo el partido se decide primero por la lesión de nuestro portero Gorka. El delantero Luis Suárez pudo haber saltado porque no llegaba al balón, pero decidió meter el pie y lesionar al guardameta rival, se vio perfectamente en las repeticiones de televisión. Si hubiera existido el VAR seguramente sería falta y expulsión. En ese caso nosotros hubiéramos sacado al portero suplente pero ellos hubieran jugado con diez. Si a eso unimos los dos goles en fuera de juego habrá que concluir que fue un partido muy atípico.
¿Como ve la situación política de Majadahonda? -Como la ve la mayoría de la gente, por lo que se opina en redes sociales y foros de la prensa local. Un equipo de Gobierno que le cuesta tomar decisiones que no sean las que le vienen desde Madrid cuando debería de ser lo contrario. Si están en puestos de responsabilidad hay que tomar muchas decisiones, gusten o no nos gusten a los vecinos, siempre que sean por el bien de todos y que supongan mejoras para Majadahonda. Pero lo fácil es abdicar de su función y nuestro alcalde, que es el de todos pues nos representa queramos o no, se ha entregado a la propaganda y a la fotogenia más descarada que hemos podido ver en un Ayuntamiento que va a la deriva. Ellos hacen los plenos telemáticos pero a los vecinos nos preparan una carpa cerrada en los Jardinillos para celebrar la Navidad. No dan ejemplo en nada, una tarea prioritaria sería la regeneración política y si salimos elegidos esa va a ser nuestra tarea principal: que los concejales sean los primeros en dar ejemplo en todo, como entre otras cosas, fichando como el resto de los empleados públicos y dando luz y taquígrafos y con toda la transparencia a la gestión municipal. Los intereses de todos los vecinos son lo prioritario y deben defenderse sin la más mínima opacidad. Los plenos deben convocarse por la tarde para que participe el mayor número de vecinos y podamos oír las necesidades reales de las personas que viven aquí. A eso le llamamos participación y política local. En fin, ¡tantas cosas!…
¿Como juzga la labor del Gobierno y de la Oposición en Majadahonda? –Manifiestamente mejorable. Los asuntos de debate en la ciudad no llegan al pleno y nosotros hacemos un esfuerzo para llevarlos con nuestros comunicados de prensa. Por ceñirnos solo a lo que ha ocurrido esta Navidad, mencionar la tardía puesta en escena de las luces navideñas, el caos en los primeros momentos de funcionamiento del tren de la Navidad, los abultados gastos del concierto de Taburete, la inseguridad vecinal en los barrios, la opacidad y falta de transparencia con las facturas del Círculo de Empresarios y en la subvención por el Ayuntamiento… Un comerciante del Mercado de Majadahonda, en la Galería Sanabria, me dijo que había tenido que echar a la responsable del Círculo porque querían organizar dentro uno de sus eventos publicitarios sin ningún tipo de permiso ni legalidad… En fin, este año 2022 vamos a recordar los programas electorales de los dos partidos del Gobierno y su incumplimiento les sacará los colores. Respecto a la Oposición sabemos que no intervienen en la gestión pero sus silencios en los temas tan candentes de la ciudad afloran unas complicidades y connivencias que se nos escapan porque no estamos dentro. Lo menos que se puede decir es que nuestro Ayuntamiento se ha convertido en una madeja de intereses que hay que aclarar y la presencia de «Vecinos por Majadahonda» se hace necesaria aunque solo sea para que entre aire nuevo y limpio en la corporación fuera de la política tradicional y de los políticos profesionales.